Suelos pedregosos, con altas concentraciones de carbonato de calcio, que le aportan mineralidad. Lugar de días soleados, refrescados por su típico aire de montaña, de noches frías y cielos estrellados, que nos proveen de uvas con muy buena acidez. La suma de estos factores nos regala un vino franco, fresco y simple
Suelos pedregosos, con altas concentraciones de carbonato de calcio, que le aportan mineralidad. Lugar de días soleados, refrescados por su típico aire de montaña, de noches frías y cielos estrellados, que nos proveen de uvas con muy buena acidez. La suma de estos factores nos regala un vino franco, fresco y simple
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